El cuerpo y nuestro organismo envejecen como consecuencia de la oxidación. El oxígeno que respiramos genera residuos, que si no controlamos, se convierten en los radicales libres que tan perjudiciales son para nosotros.
Existen muchas formas de controlar dicha oxidación, y en el artículo de esta semana vamos a analizar cómo evitar las alteraciones que provoca dicho proceso en nuestro organismo:
- La dieta. Somos lo que comemos. Por ello, es importante que incorporemos a nuestra dieta alimentos antioxidantes, como frutas y verduras, cereales o frutos secos. Evitar todo lo refinado, y aumentar el aporte de alimentos naturales.
- Ejercicio físico. Moderado, pues el exceso de actividad física también genera estrés oxidativo. De ser así, recurre a elementos antioxidantes.
- La hidratación. El agua hidrogenada o agua con carga de hidrógeno ayuda a frenar los radicales libres, aportándonos una mejor hidratación y frenando el envejecimiento de nuestras células. Para ello te aconsejamos que te hagas con una máquina de agua ionizada, ideal para consumirla toda la familia en casa.
Interesante información, muchas gracias.