Son muchos los beneficios que esta sustancia aporta a la medicina estética. Además de conseguir unos resultados espectaculares, el Botox en Sevilla se lleva empleando desde hace ya bastantes años. Lo cual, conlleva a un conocimiento profundo del material para la aplicación en los distintos tratamientos.
Una de sus aplicaciones es la prevención y eliminación de arrugas faciales. Además, su correcta aplicación no implica la inexpresividad en la rostro. Las inyecciones son casi indoloras, pero en zonas de mayor sensibilidad se puede usar una crema anestésica que minimice la sensación del pinchazo.
Otra de sus aplicaciones es la disminución de la hipersudoración en distintas zonas como la frente o las axilas, algo que afecta a gran parte de la población.
Por otro lado, los resultados de esta técnica en medicina estética en Sevilla pueden notarse la primera semana de tratamiento y el efecto puede durar aproximadamente un año.
¿Aún no te animas a probar el Botox?